jueves, septiembre 20, 2007

¡Experimenta!

Siempre he dicho cosas como "el que la sigue la consigue", "hay que luchar para conseguir algo", "no nos acomodemos, luchemos" y tonterías, en el sentido más abierto de la palabra, como estas.
Y lo digo porque resulta fácil quejarse. Decir que todo va mal, que no accedemos a cosas que otros que tienen más "suerte" si, etc, etc cuando lo verdaderamente es que no nos arriesgamos. No siempre es fácil arriesgarse. Siempre es mucho mas cómodo dejar que las cosas pasen, no asumir que igual perdemos lo que ya tenemos...Pero no nos damos cuenta de que esto luego quiere decir que no accederemos a ciertos...llamémoslo, premios.

Normalmente me siento muy molesto con este tipo de situaciones o de personas. No con los que optan por dejar que las cosas pasen, que se conforman con lo que hay. No, eso, por supuesto, es muy respetable. Me crispan los que mantienen una actitud totalmente negativa al respecto y luego se quejan por todo.

No os voy a contar mi última situación de estas, apenas hace una hora, en una reunión donde ante un conflicto que teníamos que intentar solucionar, una de las personas no ha parado de criticar, negarse a hacer nada y abogar por el "esto no funciona", "pues no voy a hacer no se qué porque para lo que sirve", tantas peticiones, etc, etc, etc.
Que por cierto, anda que no hay que tener mano izquierda para sacar provecho de estas situaciones...y hacer que todos salgamos ganando.

Os hablaré de como sin darme cuenta, hace un par de días me encontré en la situación contraria. En casa del herrero...cuchillo de palo.
Siempre me quedo, o bueno, no siempre, a veces, de que los viajes de trabajo son eso, de trabajo y que realmente no se puede casi visitar nada ni conocer, en muchos casos, dado lo ajustado de los horarios. Sin embargo, arriesgando un poco...¿pueden cambiar las cosas?
He estado varias veces en Rumanía en los últimos meses. Una de las veces incluso tuve el tiempo necesario para visitar el centro y algunos lugares de interés; Y una de las cosas que más despertó mi curiosidad fueron los conciertos, siempre muy sonados, nunca mejor dicho, en los diferentes auditorios, teatros o palacios. Siempre, sin embargo, había preferido la vuelta al hotel, la cena tranquila, incluso un baño en la piscina del hotel cuando las circunstancias lo permitían.
En esta ocasión, sin embargo, tuve la oportunidad de asistir a un concierto, básicamente empujado por las circunstancias, los clientes y los compañeros locales, de la filarmónica de Bucharest.
La experiencia no pudo ser mejor. Siempre faltan palabras para describir lo que se percibe solo escuchando o viendo.
Pero la lección aprendida fue que arriesgar la tranquilidad de la vuelta al "hogar" en forma de hotel y el sacrificar horas de sueño (hasta dormir sólo 3 si quería coger el avión al día siguiente), supuso un premio a disfrutar.
Y la rabia de decir...lleva cuidado, que te vas volviendo mayor y cómodo...

En fin, la verdad es que después de releído, el ejemplo quizás no refleja todo lo que inicialmente quería decir, o simplemente es demasiado superficial para la importancia de la lección principal. Pero el caso es que a mí me sirvió para recordar cosas importantes. Y tal como lo sentí, así os lo comento.

Enjoy! que ha es viernes (o casi)

7 comentarios:

El artista antes conocido como Bosco dijo...

He pasado por etapas absolutamente miedosas, conformistas y comodonas y he llegado a bominar de ellas. Y tu post me viene al pelo. Asi que , a todos, escuchar lo que dice mi tocayo : Son dos dias, no vale la pena decir que no por decir que no. Yo ( como no ) también estoy en esa dinámica... vive les experiments !!!!

Bertix dijo...

Para mí siempre es reconfortante poder ir a un concierto tras una jornada laboral. Si además es de Rachmaninov ... ni te cuento.

Siempre que hay dos opciones, para disfrutar de una tienes que sacrificar la otra o parte de la otra, en tu caso, fueron horas de sueño.

Quejarnos sabemos todos, pero podríamos intentar quejarnos de forma creativa, igual terminábamos riéndonos ;-)

Unknown dijo...

LA queja está bien si se usa para desahogarse. Es muy negativa si solo se usa para autocompadecerse y no se hace nada para cambiar la situación. Creo que es bueno arriesgarse, aunque te equivoques.

Always Candy dijo...

La autocompasión cuando uno no tiene con quien consolarse no es tan mala,... desahoga.

Y bueno, tengo buenas noticias,... lo conseguí!!

Besos y mil gracias por todo tu apoyo.

Anónimo dijo...

¡Odio a los que odian!

Fdo. Pitufo gruñón

Unknown dijo...

Desde luego, hay que aprobechar bien el tiempo, que la vida son dos dias y pasan volando, es necesario dormir, pero de vez en cuando no viene mal sacrificar descanso por investigar nuestro entorno, y cuanto más investiguemos nuestro alrededor más querremos saber, es una espiral viciosa de saber.

besos

Erika dijo...

Pues la verdad de poco sirve la autocompasión y eso se va aprendiendo a golpes. ¿Qué sacamos? pues nada porque al fin y al cabo nadie nos va a sacar las castañas del fuego.

Me ha gustado tu blog, te felicito por él.